Después de 3 años de la separación y divorcio entre Natalia Maurer Díaz
Barriga y Enrique Veana Urueta vino lo peor. En entrevista para el
noticiario “Primera Red” Natalia Maurer contó lo que ella misma menciona
como una “pesadilla”, después de que su ex esposo se llevó a sus tres
hijos.
En este caso hay personas que “protegen” a su ex esposo, “personas
importantes en Puebla”, como ella los llama, sin embargo Natalia Maurer
se reservó los nombres porque caería en difamación.
Que “recapacite” es la petición que hace esta mujer a su ex cónyuge
Enrique Veana Urueta, después de no tener contacto con sus hijos desde
hace casi 3 años a pesar de haber ganado la patria potestad, tras el
proceso legal.
Como lo hace en su página de internet www.conocemihistoria.com.mx,
Natalia Maurer Díaz Barriga compartió la desesperación que sufre desde
que perdió a sus tres hijos.
La mañana de este lunes circuló información sobre una demanda
interpuesta por Enrique Veana en contra de ella –Natalia Maurer-, por el
delito de difamación.
La madre de los tres menores: Enrique, Natalia y Camila Veana, se dijo
despreocupada por la denuncia presentada en su contra, pues afirmó que
la búsqueda de sus hijos es un derecho no sólo legal, sino natural.
“La denuncia no tiene sentido, lo que debería hacer Enrique Veana es
levantar el teléfono, hablar conmigo y dejarme ver a mis hijos”, reclamó
Natalia Maurer.
Aunque la historia ha sido difundida en medios de información, en la
página de Internet www.conocemihistoria.com.mx, a través de medios
publicitarios como espectaculares, con el apoyo del Instituto Poblano de
las Mujeres, aún se desconocer el paradero de Enrique Veana y sus tres
hijos, quienes se presume se encuentran en Estados Unidos.
Mensaje para Enrique:
“Decirle que por favor recapacite y que se comunique conmigo para poder
estar con mis hijos, no estoy pidiendo una incongruencia. Quiero que
conozcan de mí y yo de ellos”.
Sobre el caso, la Procuraduría General de Justicia del estado de Puebla
ya tomó conocimiento, sin embargo el caso lo sigue la Jueza Octavo en
Materia de Defensa Social, Maestra Blanca Laura Ollivier Palacios, quien
no ha determinado la procedencia de la orden de aprehensión contra
Enrique Veana.
Con fecha de recibido del 17 de julio de este año, el procurador de
General de Justicia, Rodolfo Igor Archundia Sierra, recibió una petición
por escrita para que apresurar el proceso de detención del sujeto que
mantiene privados de la libertad a sus 3 hijos. La carta está firmada
por Natalia Maurer Díaz.
domingo, 9 de marzo de 2014
Natalia Maurer Díaz Barriga pide a través de dos espectaculares colocados en Puebla, que le devuelvan a sus tres hijos.
Con la colocación de dos espectaculares en vialidades
poblanas, Natalia Maurer Díaz Barriga, busca que su ex esposo, el
empresario Enrique Veana Urueta, dueño de Crista Veana, le devuelva a
sus hijos Camila, Enrique y Natalia Veana Maurer de 8, 11 y 13 años de
edad, respectivamente.
En rueda de prensa, la mujer, perteneciente a una de las familias más conocidas en la sociedad poblana, comentó que desde hace casi tres años que se separó del padre de sus hijos, comenzó una batalla legal por la custodia de los menores, la cual finalmente le dio la razón e incluso hay una orden de aprehensión en contra de su ex marido por el delito de sustracción de menor, toda vez que se niega a cumplir con el mandato del juez.
“Lo único que pido al licenciado Mario Marín Torres es que se haga justicia”, dijo Natalia Maurer, al asegurar que durante estos años ha sido objeto de calumnias por parte de los familiares de quien fuera su pareja, lo que ha ocasionado el desprecio de sus propios hijos.
“Yo pido que me devuelvan a mis hijos, yo lo único que quiero es gozar de su crecimiento, de su cariño y que gocen de mi, de lo que yo tengo que darles”, suplicó.
Indicó que actualmente sus hijos están alejados de su familia, no van a la escuela y tampoco tienen contacto con sus amigos.
Carlos Isaac Rodríguez Nava es el juez que falló a favor de entregar la custodia de los menores a Natalia Maurer, después del proceso de divorcio que culminó a finales de 2008 en el juzgado Primero de lo Familiar.

En rueda de prensa, la mujer, perteneciente a una de las familias más conocidas en la sociedad poblana, comentó que desde hace casi tres años que se separó del padre de sus hijos, comenzó una batalla legal por la custodia de los menores, la cual finalmente le dio la razón e incluso hay una orden de aprehensión en contra de su ex marido por el delito de sustracción de menor, toda vez que se niega a cumplir con el mandato del juez.
“Lo único que pido al licenciado Mario Marín Torres es que se haga justicia”, dijo Natalia Maurer, al asegurar que durante estos años ha sido objeto de calumnias por parte de los familiares de quien fuera su pareja, lo que ha ocasionado el desprecio de sus propios hijos.
“Yo pido que me devuelvan a mis hijos, yo lo único que quiero es gozar de su crecimiento, de su cariño y que gocen de mi, de lo que yo tengo que darles”, suplicó.
Indicó que actualmente sus hijos están alejados de su familia, no van a la escuela y tampoco tienen contacto con sus amigos.
Carlos Isaac Rodríguez Nava es el juez que falló a favor de entregar la custodia de los menores a Natalia Maurer, después del proceso de divorcio que culminó a finales de 2008 en el juzgado Primero de lo Familiar.
Por
influyentismo, negligencia o cualquier otro aspecto, en Puebla sus
habitantes comienzan a pedir justicia de manera pública, para evitar
aquella impunidad que ha existido desde antes de Cristo.
Es por ello, que la señora Natalia Maurer Díaz Barriga, se atrevió a publicar y pagar un espectacular en la zona de Angelópolis, el cual puede ser visto justamente cuando uno desciende del puente cuyo carril desemboca con sentido a dicho lugar.
El texto no tiene pierde: “Enrique Veana. No te escondas. Devuélveme a mis hijos.
Sr. Gobernador Pido Justicia. AP 0020/2007. www.conocemihistoria.com.mx”.
Consultando la dirección a la que hace referencia la quejosa, se puede uno enterar de la enorme corrupción que impera en nuestro sistema de administración de justicia, resultado del tráfico de influencias en este caso del empresario Enrique Veana Orueta, con políticos poderosos.
No soy nadie para juzgar la vida ajena de las personas, pero cuando leo y releo toda la porquería que ha hecho este empresario para tener a sus hijos, simplemente llego a la misma conclusión: tráfico de influencias y un pésimo sistema de administración de justicia.
Ojalá no tengamos necesidad de recurrir comúnmente a este tipo de exigencias, toda vez que deja entrever que algo está mal.
Y es que cuando estamos sedientos de justicia, a veces nos Orillan a hacer las locuras más inesperadas e inimaginable
Es por ello, que la señora Natalia Maurer Díaz Barriga, se atrevió a publicar y pagar un espectacular en la zona de Angelópolis, el cual puede ser visto justamente cuando uno desciende del puente cuyo carril desemboca con sentido a dicho lugar.
El texto no tiene pierde: “Enrique Veana. No te escondas. Devuélveme a mis hijos.
Sr. Gobernador Pido Justicia. AP 0020/2007. www.conocemihistoria.com.mx”.
Consultando la dirección a la que hace referencia la quejosa, se puede uno enterar de la enorme corrupción que impera en nuestro sistema de administración de justicia, resultado del tráfico de influencias en este caso del empresario Enrique Veana Orueta, con políticos poderosos.
No soy nadie para juzgar la vida ajena de las personas, pero cuando leo y releo toda la porquería que ha hecho este empresario para tener a sus hijos, simplemente llego a la misma conclusión: tráfico de influencias y un pésimo sistema de administración de justicia.
Ojalá no tengamos necesidad de recurrir comúnmente a este tipo de exigencias, toda vez que deja entrever que algo está mal.
Y es que cuando estamos sedientos de justicia, a veces nos Orillan a hacer las locuras más inesperadas e inimaginable
Dos años y siete meses de impunidad. Natalia
Maurer Díaz denunció públicamente que en Puebla las leyes no se hicieron
para cumplirse, ya que las autoridades judiciales locales no han hecho
cumplir una resolución dictada el 13 de diciembre de 2007, por el juez
federal primero de lo familiar.
Pues esa orden va dirigida al Poder Judicial en Puebla para que actúe en contra de su ex marido, Enrique Veana, para que dicho empresario dueño de la cadena de tiendas que lleva su apellido, le regrese la custodia de sus tres hijos: de 8, 11 y 14 años de edad.
Pero aparte hay una orden de aprehensión con fecha 30 de marzo de 2009, que se originó de la averiguación previa que tramitó, la número AP-3016/2008/NORTE, en contra de Enrique Veana por el delito de sustracción de menores, eso a consecuencia de no regresar la custodia de los niños, misma que tampoco se ha hecho valer.
Además de eso hay otra orden aprehensión en contra de la madre de Enrique, Norma Orueta Castro y/o Norma Orueta de Veana, con fecha 3 de abril de 2009, correspondiente al proceso número 40/2009, por falsedad de declaraciones, pues esta acusó a su ex nuera de loca y drogadicta.
Natalia Maurer asegura que el incumplimiento pone en evidencia que su ex esposo –quien guarda especial amistad con el secretario de Desarrollo Social en Puebla, Javier López Zavala- ha comprado a funcionarios del gobierno estatal, directamente del Tribunal Superior de Justicia, pues no hay otra razón para no hacer valer los ordenamientos legales.
Aún por lo que ha tenido que pasar, confía que la escuchará el gobernador Mario Marín para que sea directamente él quien ordene que se haga cumplir la ley para que ella pueda volver a ver a sus hijos Camila, Natalia y Enrique Veana Maurer, a quienes perdió de vista desde hace casi tres años que se divorció del empresario.
Sobre el tema, Oscar Gutiérrez Santos, abogado de Natalia, comentó que su cliente ganó la custodia de los niños. No obstante, Enrique Veana se ha valido de ‘triquiñuelas’ jurídicas para alargar el procedimiento jurídico, específicamente para acusarla de no estar bien de sus facultades mentales, por lo que no podría cuidar a sus hijos.
Peor todavía, comentó que los niños son manipulados por sus abuelos paternos, ya que la última ocasión que los pudo ver de lejos, estos la llamaron cínica, además de otro tipo de insultos, razón por la cual procedió contra su ex suegra, de quien también hay una orden de aprehensión.
Pues esa orden va dirigida al Poder Judicial en Puebla para que actúe en contra de su ex marido, Enrique Veana, para que dicho empresario dueño de la cadena de tiendas que lleva su apellido, le regrese la custodia de sus tres hijos: de 8, 11 y 14 años de edad.
Pero aparte hay una orden de aprehensión con fecha 30 de marzo de 2009, que se originó de la averiguación previa que tramitó, la número AP-3016/2008/NORTE, en contra de Enrique Veana por el delito de sustracción de menores, eso a consecuencia de no regresar la custodia de los niños, misma que tampoco se ha hecho valer.
Además de eso hay otra orden aprehensión en contra de la madre de Enrique, Norma Orueta Castro y/o Norma Orueta de Veana, con fecha 3 de abril de 2009, correspondiente al proceso número 40/2009, por falsedad de declaraciones, pues esta acusó a su ex nuera de loca y drogadicta.
Natalia Maurer asegura que el incumplimiento pone en evidencia que su ex esposo –quien guarda especial amistad con el secretario de Desarrollo Social en Puebla, Javier López Zavala- ha comprado a funcionarios del gobierno estatal, directamente del Tribunal Superior de Justicia, pues no hay otra razón para no hacer valer los ordenamientos legales.
Aún por lo que ha tenido que pasar, confía que la escuchará el gobernador Mario Marín para que sea directamente él quien ordene que se haga cumplir la ley para que ella pueda volver a ver a sus hijos Camila, Natalia y Enrique Veana Maurer, a quienes perdió de vista desde hace casi tres años que se divorció del empresario.
Sobre el tema, Oscar Gutiérrez Santos, abogado de Natalia, comentó que su cliente ganó la custodia de los niños. No obstante, Enrique Veana se ha valido de ‘triquiñuelas’ jurídicas para alargar el procedimiento jurídico, específicamente para acusarla de no estar bien de sus facultades mentales, por lo que no podría cuidar a sus hijos.
Peor todavía, comentó que los niños son manipulados por sus abuelos paternos, ya que la última ocasión que los pudo ver de lejos, estos la llamaron cínica, además de otro tipo de insultos, razón por la cual procedió contra su ex suegra, de quien también hay una orden de aprehensión.
Después de dos años y tres meses, Natalia Muarer Díaz ha recurrido a todos los medios de comunicación posible para hacer pública su historia de lo que llama el robo de sus tres hijos por parte de su ex esposo Enrique Veana Urueta, empresario poblano a quien acusa de comprar la justicia poblana.
A través de una página de internet, así expone su caso “Soy Natalia Maurer Díaz, todo inicio con un matrimonio con Enrique Veana Urueta, después de un noviazgo de casi seis años. Con el paso del tiempo, salen a flote situaciones que cuando tú crees que hay amor, no son problema, pero cuando no lo hay, se convierte en un infierno; como bien dicen, se necesitan dos para que una relación funcione, y aunque mi intención de conservarla fue constante no bastaba solo eso”.
Posteriormente, explica “Como consecuencia vino un divorcio, doloroso y a la fecha sigo sufriéndolo, no solo por la pérdida que como ser humano significa, si no principalmente a ello, se suma la pérdida de mis tres hijos. Situación que no tendría por qué estar mezclada ya que sólo me separe del padre…. Mis hijos son mi vida y son para siempre…… simplemente SON PARTE DE MI ¡!! Y así les día a luz a cada uno de ellos... siendo parte de mi.
La afectada indica que desde el tiempo antes señalado sus hijos Enrique, Natalia y Camila Veana Maurer están en poder de su papá porque los raptó y no los ha vuelto a ver.
Agrega “continúo insistiendo por todos los medios, legales, y humanos hablar con Enrique, finalmente alguna vez estuvimos juntos y como padres que somos, dimos vida a tres hermosos seres humanos que necesitan de el amor, apoyo y fortaleza de su madre.
En estos años, he aprendido y luchado con todas mis fuerzas, por mis tres grandes tesoros: ENRIQUE, NATALIA, CAMILA VEANA MAURER, que son mi aire, mi motor, mi energía y gracias a ellos sé que la vida vale la pena”.
Después de ganar litigios en juzgados locales reclama que la justicia poblana no ha regresado a sus hijos, por eso ha colocado diversos espectaculares en diversos puntos de la capital para hacer su reclamo de ver a sus hijos.
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